¿Un lobo solitario o algo más? ¿Qué le ha llevado a cometer la peor matanza por armas de fuego en Estados Unidos?

Son las preguntas que se hacen a estas horas los investigadores. El perfil de Stephen Paddock no coincide con el de alguien que mata en nombre de algo. El asesino de Las Vegas tenía 64 años, estaba retirado y le gustaban los casinos y las armas. Tenía 19 pistolas y fusiles. También le apasionaban la caza mayor y los aviones. Y el póker.

Hasta ahora la policía no ha encontrado nada que supere una banal multa de tráfico, de ahí que no se tomen en serio las reivindicaciones del tiroteo que han hecho grupos islamistas.

El hermano de Paddock asegura que no formaba parte de ninguna organización.

Eric Paddock, Hermano del asesino:

“Estoy seguro de que ha actuado solo. No tenía ningún tipo de afiliación, para nada. Ninguna Iglesia, nada de religión ni de política, nada de nada. Ni siquiera podría inventarme algo. No hay nada en absoluto”

El FBI ha rechazado la reivindicación que ha hecho el llamado Estado Islámico describiendo a Paddock como uno de sus soldados y, por el momento, descarta cualquier conexión con el terrorismo internacional.