Los Legionarios de Cristo, no solo es una de las congregaciones religiosas más afianzadas y con mayor poder dentro de la Iglesia, sino que además es una de las más acaudaladas del mundo.
Recientes filtraciones revelan que desde la congregación se utilizaron paraísos fiscales para gestionar las entradas de su servicio educativo durante la época del fundador mexicano Marcial Maciel Degollado.
Incluso, según se ha difundido a través de los Paradise Papers, algunas de esas operaciones siguen abiertas.
Todo esto figura en los comprometedores documentos que ha conseguido (y difundido) el diario alemán Süddeutsche Zeitung, compartidos por el Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación (ICIJ), y luego replicados mundialmente por Mexicanos contra la Corrupción.
Según la investigación, Maciel Degollado creó en Bermudas en el año 1992 la sociedad "The Society for Better Education" con la asesoría de Appleby. En noviembre de 1994 se le agregó la "International Volunteer Services", que también contó con la asesoría de la misma firma, para "gestionar los millonarios ingresos de su imperio educativo".
Así las cosas, se estima que el flujo de entrada era de cerca U$S300 millones al año y que el monto de dinero de ambas sociedades termina derivándose en el fondo fiduciario Ecyph Limited, con sede en las Islas Vírgenes Británicas. La cuenta por la que fluía el dinero fue abierta en el Citibank en Nueva York y era manejada por rectores y administradores de la red de universidades de la Legión.
Claro que a esas sociedades que manejaban fondos offshore millonarios, no tenían acceso muchas personas. Entre ellas, estaban: Luis Garza Medina, integrante de la acaudalada familia mexicana fundadora de Grupo Alfa; Álvaro Corcuera, quien sucedió a Maciel en la dirección general de la Legión; Evaristo Sada Derby, quien durante una década fue el secretario de la congregación y Anthony Bannon, director de la Legión en Norteamérica, según indicó Contra la Corrupción.
En todos los casos, quedó establecido en los registros de Appleby, que toda la red financiera en paraísos fiscales estaba vinculada a la dirección Vía Aurelia 677, Roma, donde tiene su sede la Dirección General de los Legionarios.
Se comprobó que el líder de la congregación -Marcial Maciel-, quien falleció en el año 2008, cometió abusos sexuales contra seminaristas, tuvo varios hijos con diferentes mujeres y era consumidor habitual de drogas.
