Aparentaba congregarse en una iglesia para no levantar sospechas, mientras cometía sus delitos
Agentes de San Antonio detuvieron a Miguel Ángel Acuña Rivera (31) por delito de posesión y tenencia de droga con fines de tráfico.
Este sujeto se hacía pasar por congregado en iglesia evangélica y desde allí realizaba sus acciones delictivas, en Ciudad Delgado.
Aparentemente había dejado los malos pasos, pero en su rostro se podían notar sus tatuajes que dejaban al descubierto su historial delictivo y que pertenecía pandillas.
Como este caso muchos pandilleros optan por pertenecer iglesias mayormente cristinas, unos por lograr desvincularse con la pandilla y otros para ampliar sus integrantes.