Ciudad de Guatemala. A 70 aumentó la cifra provisional de muertos en Guatemala con el deceso de un menor de edad, tras la erupción del Volcán de Fuego, mientras que las brigadas reanudaron hoy la búsqueda de desaparecidos, cuyo número es incierto, bajo las toneladas de ceniza, informó una fuente oficial.
Fuentes del Hospital San Juan de Dios informaron este martes de la muerte de un niño que había sido trasladado a ese centro de la capital guatemalteca con graves quemaduras.
Portavoces del Hospital Roosevelt, también en la ciudad, dijeron que allí se atiende a 19 personas afectadas por la erupción, 9 de ellos menores de edad, algunos en estado crítico.
El portavoz de la Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres (Conred), David de León, explicó que los equipos de búsqueda están concentrados en comunidades de los departamentos de Escuintla (sur) y Sacatepéquez (oeste).
Esos dos junto al departamentos central de Chimaltenango fueron los más afectados por la violenta erupción del coloso el pasado domingo, se encuentra bajo el estado de calamidad pública y en alerta roja.
León sostuvo horas antes que se mantiene el dato de 46 personas heridas, sin embargo aumentó la cantidad de albergadas a 1.877, en los distintos centros ubicados en los departamentos más afectados: Sacatepéquez, Escuintla y Chimaltenango.
"Si esta vez nos salvamos, en otra (erupción) no", dijo a la AFP Efraín González, de 52 años, sentado en el suelo de un albergue en la ciudad de Escuintla, adonde llegó con su esposa y su pequeña hija de un año tras huir de los estragos que causó el volcán en su casa en la comunidad El Rodeo, la más golpeada por la erupción.
Aún siguen desaparecidos su hijo de 10 años y su pequeña de 4, quienes quedaron atrapados en su vivienda, inundada por el lodo caliente que descendió del volcán, de 3.763 metros de altura y que emitió columnas de ceniza de unos 6.000 metros de altura.
"Nunca había pasado algo como esto", comenta a su vez Aura Concobar (38), quien también llegó al albergue desde El Rodeo, junto a diez miembros de su familia.
En imágenes difundidas en la televisión y en redes sociales, se ven levantarse enormes columnas de ceniza y en el suelo algunos cadáveres semicubiertos del material expulsado por el volcán, y viviendas y vehículos destruidos.
El secretario de la CONRED, Sergio Cabañas, indicó que los fallecidos quedaron atrapados en el material caliente que descendió del volcán, situado a 35 km al suroeste de la capital.
"Es un río de lava que se salió de su cauce y afectó la aldea El Rodeo, hay personas heridas, quemadas y fallecidas, se está haciendo la evacuación y rescate de las personas", explicó Cabañas.
La erupción concluyó después de 16 horas y media de actividad, pero "existe la probabilidad de una reactivación", indicó el Instituto de Vulcanología, recomendando mantener las medidas de precaución en las zonas afectadas.