Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de Estados Unidos emitieron el miércoles una alerta sanitaria a los médicos tras descubrir por primera vez en el territorio continental del país la bacteria que está detrás de una enfermedad rara y grave.
A raíz de una investigación por dos casos de melioidosis humana, se detectó la bacteria Burkholderia pseudomallei (B. pseudomallei) en muestras de suelo y agua de charcos de la región de la Costa del Golfo del sur de Misisipi.
Las dos personas, no emparentadas, vivían muy cerca geográficamente y se contagiaron con dos años de diferencia, en 2020 y en 2022, lo que llevó a las autoridades sanitarias a investigar los productos domésticos y el entorno de sus casas.
La melioidosis provoca fiebre, dolor articular y cefaleas, así como neumonía, formación de abscesos e infecciones sanguíneas.
En Estados Unidos se producen de media unos 12 casos al año, la mayoría relacionados con viajes a regiones tropicales y subtropicales, donde la bacteria es endémica.
Un grupo de 2021 que incluía a cuatro personas de cuatro estados estaba relacionado con un spray de aromaterapia contaminado de importación.
La mayoría de las personas sanas que entran en contacto con la bacteria no desarrollan la melioidosis, pero la tasa de mortalidad global de quienes la padecen es del 10 al 50%.
Los CDC aconsejaron que las personas del sur de Misisipi que tengan condiciones subyacentes como diabetes, consumo excesivo de alcohol o una enfermedad renal o pulmonar crónica, deben tomar precauciones adicionales.
Estas medidas incluyen evitar el contacto con la tierra y el agua fangosa, proteger las heridas abiertas con apósitos y usar botas y guantes impermeables mientras se trabaja en el jardín.
«Dado el bajo número de casos de melioidosis identificados históricamente en Estados Unidos, los CDC consideran que el riesgo de melioidosis para la población general sigue siendo muy bajo», señaló la agencia.