México: de potencia exportadora a principal importador de maíz

Laura Demurtas, coautora de “Geopolítica de los cereales” de la editorial Eyrolles, explica en el programa Escala en Parias de France 24, cómo México pasó de ser una potencia exportadora a depender de la importación de maíz desde Estados Unidos.

Hace dos décadas, México era autosuficiente en la producción de maíz, un cultivo esencial en la dieta diaria de los mexicanos, quienes consumen en promedio nueve tortillas al día. Sin embargo, esta situación cambió drásticamente con la entrada de México en el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) en 1994.

Demurtas señala: "En ese momento, los productos de los agricultores norteamericanos comenzaron a inundar el mercado mexicano a precios bajos o competitivos". Esta entrada masiva de productos extranjeros provocó que muchas explotaciones agrícolas mexicanas no pudieran competir y cerraran, lo que impulsó una migración masiva de las zonas rurales hacia las urbanas.

El impacto de esta transformación fue significativo. México, que antes era autosuficiente, se convirtió en el mayor importador mundial de maíz. Este cambio estructural en el sector agrícola mexicano ha generado tensiones en las relaciones bilaterales, especialmente en 2007, cuando México enfrentó una enorme inflación en el precio del maíz, llevando a un aumento del 42% al 67% en el precio de las tortillas en un solo año.

Hoy en día, el gobierno mexicano está tratando de recuperar su soberanía alimentaria dando prioridad a los productos locales. Sin embargo, este esfuerzo enfrenta dificultades, ya que entra en conflicto con los acuerdos comerciales vigentes con Canadá y Estados Unidos.

La situación subraya la complejidad de equilibrar la autosuficiencia alimentaria con las obligaciones y beneficios de los tratados comerciales internacionales.