Según fuentes del partido GANA, el equipo de Rigoberto Soto fue obligado a retirar de sus anuncios el número 2018, porque hace alusión a uno de los grupos terroristas que opera en el país.
A falta de una mano dura en el Tribunal Supremo Electoral (TSE), los políticos han visto en pandilleros el principal obstáculo para realizar su campaña adelantada por las elecciones del próximo año.
Fuentes del partido GANA confirmaron a El Salvador Times que el diputado por Usulután, Rigoberto Soto, se vio obligado a modificar las vallas publicitarias que tiene en diferentes puntos de este departamento debido a una inconformidad de la pandilla MS.
“Tuvo que mandar a imprimir una gran cantidad de banners porque tenían el 2018 y se iban a usar en zonas donde hay mareros de la MS y estos no dejaron”, señaló esta fuente que sigue de cerca el proceso y que pidió el anonimato.
Según se estima, la inversión que realizó el equipo que trabaja de cerca con Soto ronda los $2,000 ya que tras modificar las imágenes se tuvo que volver a imprimir los 3,500 banners encargados para la campaña.
El diputado manifestó no haber tenido ningún tipo de contratiempo con estas estructuras criminales ya que “tratamos de portarnos bien con este tipo de gente”.
No obstante reprochó que hasta el momento no se haya realizado ningún tipo de reunión con la Policía Nacional Civil para conocer los planes de seguridad que se van a implementar para que los candidatos visiten zonas con altos índices de violencia.
“Del dicho al hecho hay mucho trecho y nosotros estamos esperando esa reunión que hasta el momento no la hemos tenido con nuestras autoridades”, reclamó Soto, quien es uno de los diputados más activos en cuanto a propaganda se refiere, a pesar que el periodo permitido por la ley aún no comienza.
La policía no tiene denuncias
Policías destacados en Usulután señalan que hasta el momento no se han interpuesto denuncias respecto al acoso de pandilleros a las estructuras que mueven a los candidatos.
Al plantearle la situación uno de los agentes consultados señaló que “es posible que no pusieran la denuncia por que prefirieron cambiar el volante creyendo que era lo más fácil y rápido”.
Según este agente, en Usulután es un secreto a voces el pacto de diferentes partidos políticos con estructuras criminales.
De hecho el alcalde del municipio de Usulután, Miguel Ángel Jaime, quien ganó las elecciones con la bandera de GANA, guarda prisión por supuestamente haber pactado con pandilleros a cambio de dinero.