PNC resuelve graves homicidios gracias a la huella que dejan las armas de fuego

La Policía resolvió sonados casos de homicidio, entre estos el conocido como “masacre de Opico” suscitado en marzo de 2016 a las afueras del municipio de San Juan Opico, en el central departamento de La Libertad, gracias a la huella que dejaron las armas de fuego en la superficie de los proyectiles balísticos, utilizadas por los asesinos.

La detección del registró balístico, que contribuyó con la condena centenaria de los autores de la muerte de 11 obreros y lugareños de aquella ocasión, lo obtuvo la Policía gracias a una de tantas herramientas de alta tecnología de las que dispone conocida como Sistema Integrado de Identificación Balística (IBIS, por sus siglas en inglés), al encontrar coincidencia con las huellas dejadas por la misma arma en, al menos, dos casos más, entre estos uno donde murió uno de los autores de la masacre, unas semanas después, en San Salvador.

De acuerdo con el inspector jefe Alfredo Segura, de la División de Policía Técnica Científica (DPTC), a la fecha la institución registra en el sistema un total de 64,942 casquillos relacionados con las evidencias, y se logró la finalización de 2887 casos, se analizaron 622 armas de fuego y se estudió 1081 registros balísticos que resultaron relacionados con 3263 casos o hechos con numerosas víctimas como el de San Juan Opico, o el de una pistola incautada en 2012 a un sujeto en el centro capitalino que resultó involucrada en 22 asesinatos.

Las declaraciones las brindó Segura junto con el vocero oficial, subcomisionado Fausto Carranza, quien a su vez es el jefe de la División de Armas y Explosivos (DAE), en rueda de prensa celebrada en el Edificio Principal de la Policía este martes.

Carranza agregó que a la DAE le corresponde el registro administrativo de los proyectiles o el casquillo, el cual es introducido en el IBIS y sirve como base y de apoyo a la investigación para que se realicen comparaciones.

El vocero oficial detalló, en otro aspecto, la reducción de 500 homicidios de 2018 comparado con 2017. El año pasado hubo un total de 3,227 mientras que en 2018 se contabilizan 2,727.

Carranza atribuyó la baja de los asesinatos a los niveles de operatividad de la PNC y de coordinación con otras instancias como la Fiscalía General de la República (FGR), “las unidades centrales de investigación y los departamentos de investigación, han realizado un esfuerzo que conllevó a la captura de cientos de sujetos vinculados a delitos, impactando en la reducción de los homicidios”.

Asimismo, informó de la baja en 2018 de los homicidios en mujeres al pasar de 380 en 2107 a 320 en el presente período.

Finalmente, la Policía detalló sobre la captura de Ever Manuel Guillen, perteneciente a una de las estructuras criminales en el país, conocido con el alias de Slow, acusado de los delitos de agrupaciones ilícitas y homicidio agravado, vinculado a una privación de libertad de un hombre ocurrida a mediados del mes de julio. Slow también está vinculado con los asaltos a restaurantes de la colonia Escalón suscitados a finales de 2017.